En su momento tal invasión y adulteración de mi privacidad motivó mi rabia infinita y cierto rencor pero también el autocuestionamiento... ¿ sobre qué o para quién escribía?.
Me di cuenta que no tenía una respuesta concreta, que era algo así como plasmar o dibujar lo que sentían mi alma y mi cuerpo traducido por mi mente y desangrado por mis dedos en un papel. Era una necesidad que aliviaba o aligeraba mis emociones cargadas de hormonas, de algunos conflictos, rabias, dolores añejos y alegrías. Siento que en ese tiempo vivía para mi misma protegiéndome del dolor y casi me convertí en un ser inexpresivo a no ser por aquella mi amiga la agenda que me escuchaba sin juzgarme.
Sigo sintiendo tal necesidad, en realidad nunca me ha abandonado solo que el quehacer diario y el mal llamado crecer y ocuparse de cosas "serias"sacrifica el tiempo y a veces limita la expresión de nuestra alma e impide que se desparrame en un papel o quisá en un lienzo o en alguna manualidad.
De todo eso se trata este blog, de desahogar el alma, el espíritu, la mente, la vida, lo diario... de retomar lo del "diario" de mi recién estrenada adultez y de compartirlo y de conversarlo...
